A ver, como les explico…
En el artículo anterior les contaba sobre la Salud Mental, en que consiste y cuales son sus implicaciones. Hoy les hablo de que hacer para cuidar, mejorar o restablecerla.
Considero que uno de los mayores problemas para que muchas personas busquen ayuda psicológica es que socialmente se dice que «los psicólogos son para lo locos», sin embargo, esto no es así, ¿Por qué?, les explico fácil, si una persona es capaz de evaluar su situación y llegar a la conclusión de que sus recursos para resolverla no son suficientes, que las cosas se le están saliendo de la mano o que hay algo sobre su conducta, emociones, cogniciones, etc, que no les cuadra, pues considero que todo esto es síntoma de «cordura», es más considero que en este caso locura implicaría estar consciente de todo lo que ya menciones y no hacer NADA.
Sumemos a esto que la búsqueda de asistencia psicológica, así como los trastornos y desequilibrios mentales sigue siendo estigmatizada, porque las enfermedades o padecimientos mentales (carencia de Salud Mental) sigue siendo estigmatizada socialmente, llevando a la idea errónea de que cualquier situación donde se rompa el equilibrio psicológico es casi responsabilidad de la persona, o una falla de la misma. En estos casos, no buscar ayuda, se convierte en una más de los esfuerzos para ocultar la situación, lo cual termina empeorando el problema.
Además, existe información muy errada sobre en qué consiste, en este caso, acudir al Psicólogo. En nuestro país en la mayoría de personas todavía reina la idea que se alguien que acude al Psicólogo es una persona que “no es capaz de resolver sus problemas”, cuando esto no es así, ya que aunque alguien asista al Psicólogo es el paciente quien se encarga de solventar sus problemas, la atención psicológica le provee las herramientas. Yo en la clínica siempre les digo a mis pacientes que:
“Esto es como ir a la ferretería, Ud quiere colgar un cuadro, llega y le explica al ferretero que tipo de pared es, el tamaño y peso del cuadro, con esta información el ferretero le dice cual es el clavo más adecuado y por ende el martillo, luego Ud se regresa a su casa y cuelga Ud mismo el cuadro, no se lleva al ferretero a que haga el trabajo”.
Otro punto es la falta de información que existe sobre en que consiste la atención psicológica, muchas personas se rehúsan a asistir al Psicólogo sin saber realmente en que consiste.
La Salud Mental es algo dinámico no estático, además que se ve afectada por muchas variables que nos rodean y sobre las cuales carecemos de control. A pesar de esto, siempre hay cosas que podemos hacer, decisiones y acciones que si están en nuestras manos y que ayudan, no solo a mantener nuestra Salud Mental, sino también a construirla y disminuir nuestros niveles de vulnerabilidad antes estas variables externas.
- Hacer ejercicio: esto nos mantiene “químicamente fuertes”, ya que el ejercicio, sobre todo el cardiovascular hace que nuestro cerebro produzco las cantidades adecuadas a ciertos neurotransmisores que, entre muchas otras cosas, se encargan de mediar nuestro estado de ánimo.
- Metas: divida sus metas en a largo y mediano plazo, esto mantendrá la frustración fuera, lo motivará y aumentará la sensación de logro, así como su autoestima.
- Red de apoyo: mantenga cercanía con familiares y/o amigos, con los que sabe que cuenta y quienes suman a su vida.
- Aprenda a relajarse: busque alguna actividad que al final del día desconecte su cabeza del trabajo, que disfrute y que le permita relajarse y practíquela con frecuencia.
- Que le de el sol de vez en cuando: mejora el ánimo y ayuda a la producción de serotonina.
- Agradezca: tómese la tarea de agradecer 3 cosas que le hayan pasado en el día, esto lo ayudará a ser más “realista”, ya que adiestrará a su cerebro a que vea las cosas buenas que también están pasando, con la misma rapidez que detecta las malas.
- Ordene sus finanzas: ya que el tema dinero es uno de los principales focos de estrés.
- Busque actividades que lo haga cooperar, más que competir: eso hace que este consciente de sus cualidades, de sus recursos y aportes.
- Mantenga la política de cero tolerancia al estrés: que implica que en vez de competir con los demás sobre cuanto estrés es capaz de soportar, aprenda a identificarlo de entrada, y a penas se presente hago lo necesario para que desaparezca.
- Busque ayuda cuando lo considere necesario.
En caso de qué Ud haya hecho todo lo que considera que puede, pero no ha visto mejoras, o simplemente no sabe ni qué hacer para empezar, entonces acuda al Psicólogo y recuerde que no lo hace débil, ya que siempre será Ud la persona que deberá solventar la situación que lo llevo a la consulta, y las herramientas que adquirió no le servirán solo para una situación, si no para varias. Además, recuerde que saber que necesitamos ayuda porque percibimos que hay cosas en nuestra vida que se han salido de su lugar no es síntoma de locura, al contrario, indican perfecta cordura, locura sería tratar de ignorarlo.